Existen muchas personas mayores voluntarias dispuestas a ayudar a los demás, pero cuando escuchamos las palabras “voluntariado y “personas mayores”, siempre pensamos que son los mayores quienes necesitan ayuda.
El voluntariado permite a las personas mayores sentirse útiles y valoradas por su entorno familiar y social.
Las personas mayores que ejercen tareas de voluntariado se sienten activas y mejoran su autoestima.
Además, les permite ampliar su círculo de amistades, mejorando su calidad de vida lo que supone un mejor envejecimiento.
Cuando llega la vejez, se producen cambios en la relación con la sociedad. Los mayores dejan de ser útiles.
Una forma de seguir aportando valor y de seguir aprendiendo, es unirse a un programa de voluntariado.
Otra forma es viajar conmigo, pero eso te lo cuento al final.
Los programas de voluntariado para personas mayores permiten seguir teniendo una vida activa. Los mayores, siguen aportando las habilidades y conocimientos que les ha dado la vida.
La base de un buen envejecimiento es evitar enfermar, mantener las funciones cognitivas y físicas, y comprometerse con la vida. El voluntariado es capaz de favorecer estas tres cosas.
Hacer un viaje también. Yo creo viajes para personas mayores y las acompaño. Desde 1 a 4 personas. Pero ese no es el tema.
Las mujeres suelen participar más como voluntarias que los hombres. Esto viene dado por el rol de género dado a las mujeres en nuestra sociedad como cuidadoras.
Las mujeres han sido educadas para el cuidado, para atender a los demás. A los hombres les cuesta más dedicar su tiempo a otras personas y dejar de ser el centro de su vida.
Motivos de las personas mayores para hacer un voluntariado
¿Cuáles son las causas y razones por las que las personas mayores toman la decisión de realizar un voluntariado?
Entre los principales motivos para participar en un programa de voluntariado se encuentran:
La satisfacción personal de ayudar a otras personas.
Sienten que pueden ser útil a otros y a la vez a ellos mismos.
Muchos mayores afirman que el voluntariado mejora su salud, su estado de ánimo y su rutina.
Se sienten con mayor energía. El voluntariado tiene impactos positivos en las personas mayores relacionados con el bienestar y la felicidad. Quienes realizan un voluntariado son más proclives a sentirse felices.
En las personas de edad avanzada, el voluntariado también produce estados de ánimo más positivos, y reduce la ansiedad y las sensaciones de impotencia y desesperanza.
Este sentimiento de satisfacción lleva a las personas mayores voluntarias a sentirse plenas y les motiva a mantenerse activas; esto promueve el envejecimiento activo.
Muchas veces, el voluntariado les ha permitido superar o sobrellevar de mejor manera situaciones difíciles de sus vidas, como duelos, enfermedades y depresiones.
Las personas mayores voluntarias se sienten realizadas, sobre todo cuando experimentan la sensación del trabajo bien hecho y observan que está dando sus frutos y contribuyendo a mejorar la situación de personas que se encuentran en situaciones límite.
Las personas mayores voluntarias quieren sentirse útiles para la sociedad
Desarrollar alguna actividad que les haga sentirse más útil, permite una mayor integración en la sociedad. Los seres humanos somos seres sociales, y la desvinculación de su entorno social tiene en cualquiera de los períodos de su vida, consecuencias negativas.
Las personas mayores, tienen muchas cualidades que pueden ser aprovechadas y que son valoradas en un servicio de voluntariado: la confianza, la autoridad, la paciencia, la tolerancia, habilidad para conectar con otros mayores, habilidad para conectar con niños, versatilidad, estabilidad, disponibilidad.
Poniendo sus habilidades y conocimientos al servicio de los demás, sienten que están devolviendo a la sociedad lo que la vida les ha aportado.
Quieren sentirse parte de la sociedad y seguir aportando de otra manera.
Evitar la soledad y conocer a nuevas personas a través del voluntariado
El hecho de relacionarse con más gente, también les ayuda a vencer la timidez y perder el miedo por ejemplo a hablar en público.
El voluntariado ayuda a las personas mayores a relacionarse y convivir con otras personas, se socializa con personas de otros entornos. También ayuda a desarrollar la comunicación y el trabajo en equipo.
También se percibe el voluntariado como una oportunidad para mantenerse insertados en la sociedad, evitando con ello el aislamiento y la soledad.
Al realizar un voluntariado, las personas mayores adquieren mayor protagonismo en sus vidas, en sus familias, comunidades y sociedad en general, logrando superar con ello, el aislamiento y la discriminación y todos los estereotipos relacionados con la vejez.
Establecen nuevos vínculos sociales y afectivos y es una oportunidad de conocerse más a sí mismos y darle un sentido a la vida.
Las personas mayores voluntarias quieren seguir aprendiendo
También el voluntariado significa una oportunidad para desarrollar habilidades nuevas.
Realizar un voluntariado en la etapa de la vejez también permite desmitificar la idea de que las personas mayores no aprenden cosas nuevas y que no pueden cambiar y hacer cambios en sus rutinas de vida.
Las personas mayores mejoran su autoestima cuando realizan un voluntariado
Las personas mayores voluntarias tienen un mayor reconocimiento de sus habilidades, de sus logros, así como el aumento de una imagen propia positiva, lo que provoca un aumento de la autoestima
Cuando hacen algo por los demás, se sientan más realizadas y orgullosas de sí mismas.
Las personas mayores, también perciben el voluntariado como una oportunidad para desarrollar habilidades o reconocer talentos que no sabían que tenían. esto permite a la vez reforzar su identidad y aumentar la autoestima.
Qué supone para las personas mayores ser voluntarias
El voluntariado, les ayuda a ser mejor persona, a tomar las cosas con calma y a valorar las cosas.
Se rompe con el estereotipo de que las personas mayores son improductivas e inútiles, al reconocerse su capacidad de aportar y mejorar la calidad de vida de otras personas.
El voluntario también persigue otras motivaciones como la de sentirse útil, aprender o vivir de acuerdo a unos determinados valores.
Cuando ayudamos a otras personas, estamos realizando un acto de egoísmo, porque la satisfacción personal que nos produce es superior al esfuerzo que vamos a realizar.
Cuando somos generosos con los demás, nos sentimos bien porque hemos hecho algo bueno.
Hacer cosas por los demás en lugar de por nosotros mismos a menudo lleva asociado el reconocimiento y la valoración de los otros.
Y eso nos gusta.
Esto explica que muchas veces las motivaciones de las personas mayores con su voluntariado no solo es mejorar la calidad de vida de los demás, sino también mejorar su calidad de vida.
Efectos positivos del voluntariado en la vida de las personas mayores
El voluntariado es una de las experiencias más positivas que se pueden tener en la vida, en tanto que implica desarrollar nuevas capacidades y sentirse valorado por todo lo que se aporta.
Muchas veces se está realizando un voluntariado sin saberlo. Por ejemplo, cuando ayudas a un vecino que está enfermo.
Realizar el voluntariado no se condiciona necesariamente por el nivel de ingresos económicos, ni el nivel de estudios, sino que responde a valores y principios de cada persona y las necesidades que existen en su entorno.
El voluntariado permite la interacción con otras poblaciones de diversas características: edad, sexo, ideología, capacidades físicas e intelectuales, lo que a su vez se convierten en espacios de sensibilización social para las personas mayores.
Con ello se tienen beneficios, no sólo para las personas mayores, sino también para las otras poblaciones con las que se interactúan.
Además, se crean redes de apoyo más grandes, se crean rutinas sanas y se fortalece la autoestima al sentir que su aportación es valorada.
Qué tipo de voluntariado pueden hacer las personas mayores
Las personas mayores de 65 o 70 años son una fuerza activa de gran importancia en los programas de voluntariado de acompañamiento, educación y cultura.
Los programas con voluntarios de mayor edad suelen incidir en mejorar la vida de aquellos que se encuentran en su entorno. Es decir, son programas que se realizan en el propio barrio o a través de la asociación o centro de salud más cercano a sus hogares.
Existen muchas actividades donde las personas mayores pueden aportar su experiencia.
- Ayudar a niños y jóvenes con clases de refuerzo.
- Colaborar en actividades con niños en escuelas infantiles para generar vínculos intergeneracionales e intercambiar opiniones y experiencias (talleres de lectura, cuentacuentos…)
- Ayudar en un comedor social o en la recogida de alimentos.
- Dar clases otras personas.
- Ayudar a otras personas mayores, ya sea hacerles compañía en casa, llevarlos a las visitas médicas, hacerles la compra o cualquier tarea que no puedan realizar de manera autónoma.
- Ayudar a jóvenes que quieren montar algún tipo de proyecto.
- Apadrinar una persona recién llegada y ayudarla en su integración.
Las ONG´s son todo un filón:
- Tareas de oficina
- Recogida y clasificación de alimentos.
- Visitas de compañía a mayores que estén sólos.
- Ayuda a gestiones que no sepan resolver.
Por ejemplo, en la Fundación la Caixa, apuestan por el papel activo de las personas mayores en nuestra sociedad y organizan actividades en las que pueden implicarse solidariamente, transmitiendo y compartiendo su experiencia, o ayudando a la integración social de los colectivos más vulnerables.
Hacerte voluntario con más de 75 años o con más de 80 años es una buena opción para seguir dando sentido a tu vida y salir de la rutina.
Y hacer un viaje es otra buena opción.
Puedes verlo en esta entrevista que nos grabaron en la televisión a 2 viajeras y a mí.
Termina así:
Viajeras: nos trata como niñas.
Locutora: como reinas.
Yo: como si fuera su hijo.
Yo te preparo el viaje y te acompaño.
Disfrutar y sentir la seguridad como si estuvieras en casa, es posible si viajas conmigo.
4 respuestas
Hola,buenos dias, mi nombre es Haydee, tengo 73 a y soy una persona activa, quedè viuda en pandemia,
Toda mi vida trabajè, administro y ayudo en la limpieza,del edifice, siendo propietaria, de un departamento en el cual vivo, desde 1984, somos 17 unidades, pero hay momentos,en que quisiera hacer algo en algun voluntariado, hay mementos que me siento sola, y podria estar ayudando a alguien y darle mas sentido a mi vida, tengo 3 hijos professionals, con familia, a los cuales veo los fines de semana, pero no siempre, gracias
Gracias por la información recibida.
Ya soy voluntaria senior,pero ahora con más fuerza.
Hola Vetonica.
No hay nada mejor que sentir que todavía tienes muchas cosas que aportar a los demás.
Ser voluntaria y ayudar a otras personas mayores te hace sentir bien contigo misma.
Saludos
Juan
Hola Hayée
La satisfacción de ayudar a los demás, te proporciona emociones positivas que te hacen sentir mucho mejor. Así que ¡¡¡Adelante con el voluntariado!!!
Un saludo
Juan